7 consejos para hidratar la piel reseca del invierno

Los cambios de clima durante las cuatro estaciones se convierten en un factor trascendental que afecta a la piel, pero cuando cae el invierno esta puede llegar a resecarse como una pasa si no aplicas los cuidados necesarios. Por ello, te vamos a presentar 7 consejos para hidratar la piel reseca durante estos meses helados.

¡Toma nota!

1.- Alimentación balanceada

Este consejo podrá sonar demasiado cliché. Pero no existe nada más acertado que la frase “eres lo que comes.” De esta manera, tener una alimentación saludable resulta la herramienta más efectiva con la que combatir la resequedad.

Los alimentos ultraprocesados con exceso de conservantes, sal, azúcar o alcohol y el tabaco son elementos que no aportan ningún beneficio a tu piel no solo en invierno sino en cualquier estación.

Sigue entonces una dieta rica en vitaminas, ingiere frutas y suplementos proteicos como el Glisodin y por lo menos 2 litros de agua, mantendrán tu piel saludable.

2.- Cuídate del frío

Si no puedes contra el enemigo, es decir, el frío, no te queda más que combatirlo directamente. Por este motivo, no debes salir de tu hogar sin antes estar bien cubierto en todas las áreas del cuerpo: guantes, gorros, chaqueta, botas etc.

Los vientos fríos y la sensación térmica van causando estragos en la piel. En primera instancia no los podrás notar, pero de igual forma se irá desarrollando dolor, entumecimiento o hasta úlceras cutáneas.

3.- Hidrata  los labios

Podríamos pensar que, actualmente gracias al uso constante de la mascarilla, gran parte del rostro se mantiene cubierto y protegido del frío como los labios y nariz.  Y es que, ambas partes suelen resecarse bastante por las bajas temperaturas.

Aunque sí, la mascarilla se ha convertido en un complemento de seguridad imprescindible para cuidarnos de la pandemia del COVID-19, esta acelera los efectos de la resequedad en la piel al encontrarse sin respirar.

En ese sentido, si quieres evitar la resequedad en los labios deberás hidratarlos constantemente con vaselina. De este modo, no se cuartearán, ni causarán roturas molestas.

4.- Hidratación diaria

Aplicar vaselina en los labios te funcionará como un truco efectivo para combatir la resequedad ocasionada en invierno. ¿Y las otras áreas?

La respuesta se encuentra en la utilización de productos que faciliten la hidratación diaria. Cada cierto tiempo necesitarás hidratar las diferentes áreas del cuerpo con una crema corporal o para las manos, sérum u otros productos como las ampollas matiderm que revitalizan las células muertas ocasionadas por el invierno.

También puedes realizar mascarillas naturales desde la comodidad de tu hogar, las cuales hidratan y aportan vitaminas. La miel natural resulta un ingrediente mágico con el que podrás revivir y nutrir partes como el rostro.

5.- Utiliza productos suaves

Uno de los peores daños que puedes ocasionarle a la dermis durante el invierno, se encuentra en el uso de productos fuertes que generen un efecto irritante en las capas de la piel. Sobre todo, si estos tienen alcohol u otros abrasivos, los cuales suelen remover los aceites naturales de la piel, quitándole en gran medida su hidratación.

Por esta razón, busca productos suaves con lo que implementarás una rutina diaria de cuidado. Desde el jabón hasta la crema corporal deberán estar fabricados con ingredientes nutritivos.

6.- Evita lavar en exceso

Durante el invierno solemos darnos muchos baños tibios o calientes para mantener el cuerpo caliente. ¡No cometas este error!

Si bien, un buen baño caliente no cae mal en estas épocas, cuando lo realizas en exceso aceleras el proceso de resequedad. ¿Por qué ocurre?

Así como el uso de productos abrasivos quita los aceites naturales del cuerpo, de la misma forma pasa cuando nos lavamos en exceso. Contrarresta ese efecto realizando baños cortos, enjabonándote con productos suaves sin restregar y aplicando una crema hidratante al salir.

7.- Práctica una rutina

Para conseguir efectos significativos en el invierno, necesitarás optar por una rutina diaria de cuidado de la piel. Busca siempre el permiso de un dermatólogo, quien te explicará qué tipos de productos necesita tu dermis y cuáles podrían empeorar los efectos.

Si lo combinas con los consejos mencionados seguramente conseguirás resultados asombrosos y toda tu piel lucirá radiante en estos helados meses.