platos típicos malagueños que debes probar. Parte II

Continuamos nuestra lista de platos típicos malagueños que debería degustar todo aquel que decida visitar nuestra preciosa ciudad. En esta ocasión la lista ha sido creada a partir de vuestros comentarios con los que hemos podido comprobar que sois unos auténticos amantes de la gastronomía malagueña.

 

1. Ensalada Malagueña

En primer lugar os traemos la ensalada malagueña, un plato que nos ayudara a soportar esos días de verano en los que el sol amanece con las pilas cargadas al cien por cien.

Su elaboración es muy fácil y rápida, aunque como en casi todos los platos tradicionales, podemos encontrarnos con distintas versiones.

Nosotros os traemos la versión que creemos más común, cuyos ingredientes son: patatas cocidas, huevos duros, cebolla, naranja, bacalao, aceitunas, sal gorda, aceite de oliva y vinagre de jerez.

Podrás encontrar otras recetas en las que el bacalao sea sustituido por atún, que no lleven huevo cocido u que lleve pimiento verde.

El primer paso para elaborar este refrescante plato es cocer las patatas y los huevos. Una vez que tenemos ya estos productos debidamente cocidos procederemos a trocearlos. Lo mismo haremos con las cebollas (aunque estas serán cortadas en rodajas) y las aceitunas si es que no nos gusta dejarlas enteras.

Pelamos las naranjas y separamos los gajos. En la fase del pelado es importante poner especial interés en que no queden partes blancas de pie, para poder disfrutar más de esta fruta.

Finalmente, tan solo quedaría añadir el bacalao (u atún para quienes lo prefieran) cocinado al gusto de cada cual. Nosotros aconsejamos colocar todos los ingredientes sobre las patatas para aderezarlos justo antes de servir.

 

  

2. Gazpachuelo

 Continuando con la elaboración de platos sencillos de preparar y riquísimos para nuestro paladar, encontramos el inconfundible gazpachuelo malagueño.

El origen de esta cremosa sopa se encuentra entre los pescadores de la zona. Estos elaboraban un particular caldo de pescado al que para darle más sabor le añadían patatas y mayonesa de ajo.

Actualmente, se le ha ido añadiendo diversos ingredientes que han perfeccionado la receta original como son: acompañar la sopa con clara de huevo montada o cocida, con pescado blanco, almejas, gambas, taquitos de jamón… Y sin olvidarnos nunca de mantener el color blanco que caracteriza a este plato.

 

3. Berzas Malagueña

 Para combatir el frío que parece haber llegado a Málaga os traemos un apetecible plato calentito de berzas malagueñas.

Para elaborar este guiso necesitaremos los siguientes ingredientes: garbanzos, carne de ternera, pollo, hueso, pata o rabo de cerdo, judías verdes, zanahorias, calabazas, habas, acelgas, ajo, comino, pimentón, pimienta, sal, tocino añejo y finalmente morcilla.

A diferencia de las otras recetas cuyo tiempo de elaboración ronda la hora y media, para este plato tendremos que gozar de una mayor planificación para poder poner a remojo los garbanzos la noche anterior en agua templada con una pizca de sal.

A continuación, en una olla se añadirán todos los ingredientes excepto la morcilla y se cubrirán con agua. Podremos el fuego fuerte hasta que empiece a hervir, mientras vamos quitando las capas de grasa que se forma en la superficie.

Una vez que el agua empieza a hervir habrá que esperar cuarenta y cinco minutos para que las verduras y garbanzos estén tiernos. (En el caso de usa olla exprés que el tiempo se reducirá a veinte minutos).

Cuando el guiso lleve cuarenta minutos en la olla se le añadirá la morcilla y tras esperas esos últimos cinco minutos tendremos unas apetitosas berzas malagueñas.

 

4. Sopa de Tomate

 No existe un plato más económica, sencilla y rica que una buena sopa de tomates.

Este plato “pobre” es una opción muy saludable que nos permite dar una segunda vida a esos trozos de pan que se nos han quedado algo duro.

Los ingredientes que necesitaremos son:  pan duro, tomates maduros, caldo de pollo o verdura, pimentón dulce, cebollas, pimientos verdes, ajos, sal, azúcar, aceite de oliva virgen extra, hierbabuena y huevos.

El primer paso será hacer un sofrito con los ajos, el pimiento y la cebolla. Cuando estos estén bien pochados procederemos a añadir los tomates troceados, así como una cucharita de azúcar.

A parte pondremos agua a calentar con un poco de sal en una cacerola amplia.

Al apartar del fuego el sofrito, le añadiremos el pimentón dulce. Este sofrito podemos triturarlo (para que quede una sopa más fina) o dejarlo tal cual en el caso de preferir que la sopa tenga una textura más rústica.

A continuación, añadiremos el sofrito con el agua que previamente habíamos preparado y escalfamos los huevos tras dejarlo hervir unos minutos.

En el plato en que tengamos pensado servir la sopa ponemos el plan cortado y lo cubrimos con hierbabuena. Finalmente cubriremos la capa de pan con el caldo teniendo así un calentito y apetecible plato de sopa de tomate.

 

5. Plato de los montes

Entre los platos más afamado de la gastronomía malagueña encontramos el “Plato de los montes”.

Este tiene su origen a principios del siglo XX. Los arrieros debían cruzar los montes con su ganado buscando pasto para estos últimos. Esta era una actividad que requería de un gran gasto de energía, la cual recargaban gracias a este sabroso plato.

Los ingredientes que necesitaremos para elaborar este plato serán: patatas, pimiento verde, huevo, chorizo, morcilla, lomo en manteca “colorá”, aceite de oliva y sal.

Los pasos para elaborar este plato son también muy básicos, básicamente tendremos que freír las patatas, los pimientos, los huevos, el chorizo y la morcilla. Aunque estos dos últimos ingredientes se freirán con el aceite que suelta la manteca colorá.

Una vez que hemos freído todos los ingredientes, solo quedará montar el plato a nuestro gusto y disfrutar de este campestre plato si es posible acompañándolo de un buen vino dulce malagueño y unas aceitunas “aliñás”.

 

6. Ajoblanco

 El penúltimo plato que os traemos es el Ajoblanco, una sopa fría hecha a base de almendras, pan, ajo y aceite.

El origen de esta receta no está del todo claro, aunque se dice que ya en los tiempos de al-Ándalus, existía una sopa fría muy similar a la que conocemos actualmente.

Para elaborar este humilde plato necesitaremos además de los productos ya mencionados: agua, aceite de oliva virgen extra, sal y vinagre.

El primer lugar, si vamos a usar pan duro, este habrá que ponerlo a remojo con agua fría. Colocamos las almendras en un colador y con agua caliente las escaldamos. Después esperamos a que se enfríen y les quitamos la piel. El siguiente paso sería moler los ajos y las almendras con un poco de sal. Para terminar añadiremos el pan remojado para crear una pasta a la le pondremos un aceite (para que se ligue), vinagre y finalmente agua bien fría. Siguiendo estos pasos tendremos una sabrosa y fresquita sopa de ajoblanco.

Además, podemos acompañar la sopa con unas uvas de moscatel, que dicen ser la mejor opción, no obstante, podéis sustituir las uvas por melón, guarnición de manzana o taquitos de jamón. La elección dependerá como siempre del gusto de cada uno.

 

7. Emblanco

 Como broche final, os traemos un plato muy consumido en Málaga y con un sabor delicioso sobre todo si eres un amante del pescado: el emblanco.

Este plato tan malagueño surgió a finales del siglo XV, durante la expulsión de los sefardíes de España. Era un caldo que se preparaba con cebollas, puerros, zanahorias, calabaza y ajos. Con el paso del tiempo se le fueron añadiendo y quitando diferentes ingredientes hasta convertirse en el guiso que conocemos hoy en día.

Además, como curiosidad, decir que el nombre de este guiso se debe al limón, el cual es el responsable del color lechosos que caracteriza a este plato.

Para la elaboración de este saludable guiso necesitaremos: patatas, ajo, cebolla, pimiento, tomate, perejil, aceite de oliva, limón, sal, pimienta y el ingrediente más importante de todos, el pescado. La receta admite diferentes variedades de pescado entre los que encontramos jureles, pescadilla, bacalao o merluza.

Una vez que tenemos todos los ingredientes preparados, en una olla grande coseremos con agua durante diez minutos una cebolla cortada en dos, dos ajos enteros, el pimiento, el tomate y el laurel.

A continuación añadimos las patatas cortadas en rodajas y las dejamos cocer hasta que se pongan tiernas. Podemos aprovechar este tiempo para desescamar el pescado, cortarlo en un par de trozos grandes y los añadiremos al caldo cuando las patatas estén en su punto.

Para terminar, dejamos cocer durante un par de minutos el pescado y añadimos la sal, la pimienta negra molida y el zumo de limón.

Y así tendremos un calentito y saludable guiso emblanco.

 

 

Estas han sido las recetas que os traemos esta semana, aunque seguiremos ampliándolas, por lo que os animamos a compartir con nosotros vuestros platos malagueños favoritos así como hicieron lectores como Mari M. Sanlucar (que nos recomendó la ensalada malagueña), María Blanco (que nos demostró su amor por la gastronomía hablándonos sobre el gazpachuelo, la sopa de tomate y el emblanco), Amparo (Que coincide con María y nos recomienda el gazpachuelo), Paco Salas (que nos sugirió el saludable y calentito plato de berzas Malagueña), Natalia Lomas (hablándonos de un plato tan tradicional como es el plato de los montes) y Bernabé Santomé (con su refrescante ajoblanco).

Autora del reportaje: Celia Ramirez