4 juegos en familia que marcan la diferencia

Desde Ciudad con Alma sabemos que el 2020 está siendo un año duro, por eso nuestro compromiso por acercaros lo bonito de la vida se ha tenido que hacer aún más fuerte. Hoy os presentamos una serie de retos en familia que podréis realizar con vuestros seres queridos para que nunca olvidéis lo bueno de vosotros y del mundo que os rodea. Os lo explicamos a a continuación.

¿Alguna vez has tenido un día gris en el que pienses que nada te sale bien? En esas ocasiones es perfecto tener en casa un buzón de los piropos. Sí, sí, como lo lees. Para fabricarlo puedes usar un tarro de cristal, una caja de cartón o cualquier otro recipiente. ¿El único requisito? Que posea una ranura en su parte superior para que las personas que convivan contigo puedan deslizar por ahí los papelitos. En ellos escribirán comentarios positivos sobre ti, de forma que cuando al fin abras el buzón los días grises no lo serán tanto.

Esta es una idea estupenda para reforzar la autoestima de los más pequeños de la casa, así como su predisposición a realizar cumplidos a otras personas, dos aspectos fundamentales para su correcto desarrollo.

Esta iniciativa la puedes combinar, por ejemplo, con el tarro de los recuerdos. ¿Nunca habías oído hablar de él? Es un juego muy sencillo y divertido. En primer lugar coge un tarro de cristal, por ejemplo uno de mermelada. Límpialo bien y decóralo como más te guste. Nosotros somos fans de los lazos de colores, ahí te lo dejamos. ¿Y para qué? Pues bien, imagina que has salido a pasear con unos amigos y ha sido un día estupendo, de esos que no querrías olvidar nunca, pues describes cómo ha sido el día y cómo te sientes. De esta forma, en un año puedes abrir el tarro, leer las notas y recordar esos momentos.

Una buena opción si realizáis este juego en familia es usar papeles de colores y adjudicar un color a cada miembro de la familia. Así podréis utilizar un tarro conjunto y distinguir de quién es el recuerdo cuando lo abráis.

¡Otra idea! ¿Alguna vez te has planteado pintar un cuadro en familia? Para hacer el calendario de colores, coge una cartulina de tamaño A4 o A5, dibuja filas y columnas hasta dividirla en celdas pequeñas, una por cada día del mes y por cada miembro de la familia. Es importante que el fondo sea blanco, porque pintaremos una casilla al día. Usaremos el color amarillo para los días felices, el naranja para aquellos en los que nos haya pasado algo bueno, el verde para cuando nos sintamos agradecidos, el gris para cuando estemos enfermos y el negro para los días tristes.

Al finalizar el calendario, escribiremos en la parte trasera el mes del que se trata y cuando tengamos las doce cartulinas las uniremos en orden creando un espectacular cuadro donde podremos ver qué color ha predominado en nuestro año.

Pero si a ti lo que te van son los juegos dinámicos, la pelota de los cumplidos es una opción perfecta para jugar en familia. Solo necesitas un balón, mejor si es tamaño XXL e hinchable para evitar destrozos si juegas en interior. Una vez lo tengas, sentaos en corrillo e id pasándoos la pelota sin ningún orden. La persona que la lanza es la única que sabe a quién va dirigida. Si la pelota cae en tus manos, debes decir alguna virtud de la persona que te la ha lanzado. ¡Esta es la opción perfecta para hacer que los niños de la familia vean que hacer comentarios positivos puede ser de lo más divertido!

¿Qué te parecen estas ideas? ¿Te has quedado con ganas de más? Coméntanos algún juego en familia que nos haya faltado. ¡Cuántos más sepamos mejor!

Autora del artículo: Ana Eva Jiménez