Todo lo que no conocías del Cementerio Inglés

La oscuridad otorgada por la noche era el momento justo en el que los extranjeros protestantes bajaban a las orillas de las playas malagueñas para enterrar a sus familiares fallecidos. Lo hacían en playas poco concurridas y en alerta continua para no ser descubiertos por las fuerzas de seguridad de la ciudad. En 1831 todo cambió con la construcción del cementerio St. George’s o Cementerio Inglés. La nueva necrópolis malagueña se convertía en el primer cementerio protestante del país. William Mark cónsul británico fue el encargado en conseguir los permisos necesarios para la construcción de un camposanto para poder acoger a sus compatriotas protestantes que no podían ser enterrados en la ciudad.

Esta necrópolis posee un gran patrimonio artístico funerario y epigráfico, y su abundante vegetación lo convierten en un lugar particularmente bonito. El lugar contiene un encanto peculiar y son cientos de historias las que reposan en estas tierras.

Robert Boyd fue el primero en ser enterrado en este cementerio tan solo cuatro meses después de terminar su construcción. Boyd fue fusilado junto al general Torrijos en la playa malagueña de San Andrés el 11 de diciembre de 1831. Unos años más tarde los malagueños se vieron sorprendidos por una tragedia en su costa. La fragata ‘Gneisenau’, de origen alemán, se hundió a causa de un temporal, dejando un total de 41 víctimas. El comandante de la embarcación Krestchmann y todos los tripulantes fueron enterrados en este cementerio.

Estos momentos históricos concedieron a Málaga dos de los lemas del escudo de la ciudad. Los malagueños se ganaron el título de MUY HOSPITALARIOS por la ayuda que ofrecieron en el naufragio alemán. Además, las hazañas de Boyd y Torrijos hicieron que a Málaga se le concediera LA PRIMERA EN EL PELIGRO DE LA LIBERTAD.

Jorge Guillén enamorado del mar y de la ciudad decidió pasar sus últimos años de vida en Málaga. Tal era su devoción por el agua que pidió ser enterrado enfrente del mar, así que Jorge Guillén reposa en el Cementerio Inglés. El velatorio del poeta fue uno de los más multitudinarios que se recuerdan en la ciudad, los malagueños acudieron en masa para despedir al poeta que era muy querido en la ciudad.

Una antigua leyenda británica cuenta que la última persona que es enterrada en el cementerio se convierte en el vigía que debía velar por todas las almas que allí reposan. Es curioso que la última persona en ser enterrada en el cementerio fue Antonio Alcalde que era el último vigilante del cementerio en la vida real.

El Cementerio Inglés de Málaga fue nombrado en 2012 Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía. Además, está registrado en la asociación de cementerios significativos de Europa. El camposanto se puede visitar todos los días de la semana y se encuentra ubicado en la avenida de Príes, 1.

Málaga posee un sinfín de rincones llenos de encanto y sin lugar a duda el Cementerio Inglés es uno de estos. ¿Lo habéis visitado alguna vez o conocíais las historias vinculadas a la necrópolis?

Autora del artículo: Maria Maldonado

Fotografías: sacadas de la web oficial del cementerio