Cómo aplicar el Feng Shui en tu día a día

Desde hace unos años la técnica del Feng Shui se ha introducido en las vidas de los malagueños, causando curiosidad e interés por ver de qué se trataba, pero hay personas que no saben en que se basa. Por ello, hoy os explicaremos qué es el feng shui, en qué consiste y cómo podéis aplicarlo en vuestro día a día y en vuestros hogares.

El Feng Shui es una antigua técnica china que tiene el objetivo de encontrar el equilibrio de la energía vital de una persona, gracias a la distribución, la decoración y la orientación dentro del hogar, la zona de trabajo o las estancias en las que se desarrolla el tiempo de ocio.

Si traducimos al español las palabras “feng shui”, encontramos que su significado es viento y agua. Esto se debe a que cuando esta técnica surgió se utilizaba para estudiar los cambios ocasionados en el clima, los astros y la naturaleza y cómo afectaban al Chi (energía vital) de las personas. A partir de la época imperial el feng shui solo lo utilizaban las clases altas de la sociedad y empezaron a utilizar esta técnica para construir palacios y edificar nichos y tumbas. Con la llegada de la república el uso de esta técnica se prohibió, es por eso por lo que se ha desarrollado más en otras zonas del mundo que en China.

Muchas personas piensan que el uso del Feng Shui en sus casas es beneficioso para su vida cotidiana, ya que al aplicarlo en sus hogares logran que la energía fluya. Para conseguir eso deberéis tener en cuenta el Chi (la energía vital), el Yin y el Yang y el Mapa Bagua. ¿En qué consisten estas tres cosas?

En primer lugar, el Chi es, en la cultura china, la energía vital que tienen todas aquellas cosas del mundo físico y tiene como objetivo crear energía positiva. Por otro lado, el Yin Yang, en la filosofía oriental consiste en dos fuerzas que son opuestas y complementarias al mismo tiempo y que equilibran la energía. Este es muy importante para el Feng Shui, ya que es eficaz a la hora de contrarrestar estados de ánimo.

Por último, el Mapa Bagua. Este es un plano que indica qué energías fluyen en cada rincón de un hogar. El mapa cuenta con nueve áreas que se corresponden a los aspectos vitales de cada persona. A la hora de decorar vuestra casa siguiendo el Feng Shui, tendréis que saber en qué dirección y espacio de la casa va cada energía.

Para empezar a ordenar vuestras casas a partir del Feng Shui, debéis tener en cuenta los siguientes elementos: la luz, muebles, tonos y colores, plantas, ventanas, orden, suelo y pasillos.

• La luz debe ser natural o solar, ya que dan mayor energía. Además, lo mejor es dar más claridad a las estancias como el salón, el despacho o la sala de estar y dejar una luz más sutil en los dormitorios. Es muy importante eliminar los lugares oscuros, ya que la energía no fluirá adecuadamente.
• A la hora de colocar los muebles, no los pongáis en la dirección de la luz que dan las ventanas y las puertas, porque estaríais entorpeciendo el camino de la energía. Para crear más, lo mejor es utilizar materiales que despierten calidez.
• Por otro lado, también están los suelos que deben ser uniformes y del mismo material, para que la energía fluya libremente por todos vuestros hogares.
• En cuanto a los tonos y los colores os recomendamos que los combinéis, ya que habrá mayor equilibrio. Cada color está relacionado con los elementos de la naturaleza y tienen percepciones diferentes. Los colores más vivos son el blanco, amarillo, naranja y rojo y los más placenteros son el negro, azul, marrón, verde y gris.
• El Feng Shui recomienda tener plantas en casa, ya que os pueden ayudar a equilibrar los cinco elementos de la naturaleza, aumentar la capacidad de concentración y aprendizaje, entre otras muchas más funciones. Algunas plantas muy útiles son los lirios o el trébol. ¡Eso sí! Nunca conservéis las plantas marchitas, tenéis que deshaceros de ellas.
• Para el Feng Shui las ventanas son “los ojos de las casas”. La existencia de estas en una casa debe ser equilibrada, es decir, tiene que haber pero solo las necesarias, ni muchas ni pocas, un punto intermedio.
• Las casas tienen que estar siempre recogidas, pero el Feng Shui insiste más en ello, ya que considera que el desorden no es bueno porque no deja fluir la energía.
• Por último, en todas las casas hay pasillos, por lo que el pasar por ellos debe ser algo fácil. Esto quiere decir, que en el Feng Shui se recomienda no colocar muebles en los pasillos para que no se conviertan en obstáculos.

Llegados a este punto ya conocéis un poco más sobre qué es el Feng Shui y cómo aplicarlo a vuestro día a día. Ahora nos gustaría saber si conocíais esta técnica anteriormente, no dudéis en dejarlo en comentarios. Y por último, ¿utilizaríais el Feng Shui en casa? ¡Os leemos!

Autora del artículo: Paula Tejada Fuerte